EL pasado miércoles 21 de febrero, en la sucursal del Banco Macro ubicada en Gral. Martin Güemes 651 de Salta capital, se produjo gran malestar entre los usuarios que asistieron a hacer tramites, retiro de recibos y cobros; quienes se encontraron con poco personal en el sector de los cajeros en mano, donde de las 13 cajas que deberían estar disponibles, solo había dos habilitadas.
La situación irregular produjo muchas demoras en la respuesta a las personas que asistieron, que en su mayoría eran jubilados, algunos con situaciones de salud delicados que más allá de la prioridad que se les debería haber brindado se encontraban esperando muchas horas sin novedades.
Antes esta situación se consultó a la gerente del Banco Macro la Sra. Adriana Catalano, quien se mostró distante y lejos de brindar respuesta ante la situación que manifestaban los usuarios, dijo que de las seis personas que debían estar atendiendo, tres se enfermaron ese día y tres cajas estaban disponibles, sin embargo, no era tal cual como afirmaba la funcionaria ya que los usuarios presentes nos comentaron que había solo dos personas atendiendo. Catalano, luego consultarle por lo que estaba sucediendo, hizo que se reincorpore otra caja de atención.
Así mismo les preguntamos a las personas que estaban esperando que su turno sobre la calidad del servicio en atención que se les brindaba y nos dijeron que las demoras en la atención son recurrentes, siempre largas filas, pocas cajas habilitadas y que en cuanto a los tramites no hay una guía concreta y adecuada en la atención, generando que los usuarios terminen más confundidos.

